EVENTOS

Sección de Archivos y Derechos Humanos del Consejo Internacional de Archivos (ICA, por sus siglas en inglés)
Fue creado en 1948, en París, es una asociación de archivos y archiveros y promovido desde UNESCO.
El ICA cree en que la gestión de documentos es una condición esencial para el buen gobierno, la aplicación de la ley, la transparencia administrativa, la conservación de la memoria colectiva de la humanidad y el acceso a la información por parte de los ciudadanos.
El Consejo Internacional de Archivos (ICA) contribuye para que se garantice una efectiva gestión documental, la preservación, cuidado y la disponibilidad del patrimonio archivístico mundial mediante la representación de gestores y profesionales de los archivos de todo el mundo.
A partir de una de las resoluciones aprobadas en la Conferencia Internacional de la Mesa Redonda de Archivos (CITRA) celebrada en México, en 1993, la UNESCO y el Consejo Internacional de Archivos encargaron a un grupo de expertos de la redacción de un informe sobre la gestión de los archivos de los servicios de seguridad de desaparecidos regímenes represivos. El grupo, encabezado por Antonio González Quintana, entregó su informe, Los archivos de la seguridad del estado de los desaparecidos regímenes represivos, en 1995. En él se subraya el papel fundamental de estos archivos para garantizar a los ciudadanos sus derechos colectivos e individuales, ya que los archivos policiales utilizados para mantener a las personas bajo coacción serían, irónicamente, las mejores armas para asegurar rehabilitación individual y la persecución de los perpetradores de violaciones de derechos humanos y la reparación de los daños sufridos por las víctimas de esos regímenes.
En 2003 los Directores de Archivos Nacionales y los Presidentes de Asociaciones Naciones y Secciones del Consejo Internacional de Archivos (ICA) organizó la Conferencia de Ciudad del Cabo. Dicha conferencia desempeñó un papel decisivo en la identificación de los vínculos entre los archivos y los derechos humanos y el papel vital de los archivos en las sociedades en transición como instrumentos para la defensa de los derechos individuales y colectivos en países que anteriormente eran escenario de graves violaciones de derechos humanos. También reveló claramente la necesidad de reconocer la vulnerabilidad de tales documentos y adoptar un enfoque profesional para su conservación.